lunes, 11 de marzo de 2013

ANIVERSARIO

Hoy he hecho uso de mi libertad de cátedra para explicar a mis alumnos de bachillerato que se cumplen nueve años de una masacre. La del 11-M. Que nueve años después siguen de rositas los culpables y sigue en pie la patraña que nos quisieron vender como verdad judicial. Que hay un antes y un después en la relación del español de a pie y las instituciones que permitieron que no pasara nada después del ultraje. Me han preguntado ¿como el 11-S, profe?. Les digo que no. Que Giuliani dió la cara y la talla y también Bush, aquí sus homónimos no; que allí la oposición dejó de existir para arrimar el hombro con el gobierno, aquí no. Que allí se investigó a fondo y la instrucción fue rigurosa, aquí no. Que allí no hubo paños calientes y aquí se corrió una cortina siniestra. Allí no se politizó el atentado, aquí se politizaron las asociaciones de víctimas. Que ni entonces ni nunca la democracia norteamericana ha consentido que en la jornada de reflexión pase nada parecido a lo que pasó aquí. Luego he invitado a los creyentes a que rezaran conmigo por las víctimas y sus familias y a los no creyentes que guardaran silencio respetuoso. La Bulla sigue de luto y reza por todos los que fallecieron.

3 comentarios:

Clo dijo...

Olé!
has hecho muy bien, hay que hablar claro, no se de qué les das clase pero hace 9 años hubo mucha confusión, yo por aquel entonces cursaba bachiller y habría estado bien que alguien, en medio de aquel caos, nos hablase.claro.

Lo de invitarles a rezar o a silencio respetuoso es para quitarse el sombrero.

Altea dijo...

¡Uaaauuuuu!
¡Clap, clap, clap!

Nodisparenalpianista dijo...

Joe, no hay quien pare la la Dulci.