jueves, 11 de noviembre de 2010

MARIA

La llamaremos María. Es saharaui. Tiene pasaporte belga porque su madre se lo pudo conseguir. Sin embargo en los papeles, en el apartado lugar de nacimiento, consta una población saharaui, diremos El Aaiún. Cuando llegó al Instituto a matricularse en bachillerato, hubo polémica ¿Por qué? Pues porque tenía que firmar impresos y aunque en su libro de escolaridad saharaui consta Sáhara Occidental, a su lugar de nacimiento le correspondía nacionalidad marroquí. María se negó a firmar a costa de perder la matrícula. Yo no soy marroquí, decía, nunca lo he sido ni lo seré. Nací en El Aaiún y soy belga. No firmo nada que diga Marruecos. La secretaria se tiraba de los pelos creyendo que la chica no la entendía. Y vaya si la entendía; lleva entendiendo a los marroquíes demasiado tiempo. La niña no cedió. No firmó nada. Se la matriculó con la fotocopia del pasaporte belga, con el libro de escolaridad y sin datos de la ciudad de nacimiento. María quiere estudiar y prepararse. Es una chica discreta, trabajadora y tímida. Estos días está seria, triste, callada. Y los cobardes constatan pero no condenan. La Bulla brinda por el valor que tiene María, y por la suerte que tiene de haber podido escapar de los grilletes alauitas.

4 comentarios:

Altea dijo...

Uf, menudo lío, pobre chavala. No creo que sea el primero ni el último, probablemente tendrá que ponerse firme muchas veces con ese asunto.
Merece por lo menos una de Rioja.

Dulcinea dijo...

Pues venga ese rioja por esta chica y por todos los saharauis que se distancian del rey moro.

Vale también para todos los españoles nacidos en el protectorado que han de sufrir ver marruecos en su dni cuando siempre han sido y serán españoles.

No es burocracia, es burrocracia y política trilera.

Nodisparenalpianista dijo...

María mola. Porque los tiene muy bien puestos. Ojalá nos siga dando lecciones como esa.Un Rioja no, once cajas.

maria jesus dijo...

Pues menos mal que su pasaporte es belga, si no sufriría la indefensión de ser español